viernes, 6 de marzo de 2009

"EL BEBE QUE LLORABA"

“EL BEBE QUE LLORABA”

Esta historia comienza algunos años atrás, 1999 para ser exactos; como cada año llego el verano, y como mi mamá trabaja en esas fechas, acostumbraba mandarme a Michoacán con mis abuelitos y el resto de mi familia, para que pasara nuevamente mis vacaciones haya.
Y todo parecía muy normal mi tía me espero en la central de autobuses como cada año, me llevo a casa de mi abuela, también como cada año, parecía que todo seria tan monótono, como cada año. Pero ese año había algo que cambiaba todo, unos tíos que vivían en Estados Unidos, habían regresado, ellos eran muy extrovertidos, siempre estaban investigando y arriesgando su vida en deportes extremos y cosas por el estilo. Yo aun era pequeño, pero ellos me causaban tal admiración que me agradaba mucho salir con ellos, y al parecer mi forma de ser también les agradaba.
Estaba ya a mitad de mis vacaciones y todo seguía igual de divertido, salíamos todos los días al campo, me llevaban a cabalgar, juagábamos todo tipo de juegos algunos inventados y otros que ya existían.
Un viernes estábamos ya un poco aburridos, y como no si ya habías hecho y deshecho de todo un poco, ese día transcurrió mas lento, me imagino que fue por que no teníamos nada que hacer, solo nos veíamos unos a otros tratando inventar una nueva locura, pero al parecer a nadie se le ocurría nada. El atardecer llego y un primo que estaba con nosotros, nos propuso que seria bueno contar historia de terror y como ya estaba anocheciendo, a todos nos pareció una muy buen idea.
El se ofreció a comenzar, y nos dijo que la historia que nos contaría era un mito local y que había pasado a orillas del ranchito en donde estábamos. Uno de mis tíos le dijo que primero nos dijera donde había pasado eso, que así acusaría más miedo por que sabríamos en donde fue. Nos dijo que aquello había pasado en un pequeño cuartito que se encontraba en el campo entre algunas parcelas, de inmediato todos ubicamos el lugar ya que apenas, el día anterior habíamos pasado justo por ahí y nuestros caballos se habían espantado un poco, sin saber por que.
El nos dijo que ya no los interrumpiéramos, y comenzó a contarnos la historia: todo comenzó algunos años atrás en este mismo ranchito, una señora que vivía a orillas del pueblo había quedado embarazada, pero su esposo la abandono por que desconfiaba de la paternidad de ese hijo, la señora era dueña de las parcelas que rodeaban la casita, la gente dice que días después de que la señora dio a luz, se fue del rancho, pero lo raro es que la señora se fue sola, no llevaba a su bebe en brazos. A una de sus vecinas le pareció muy raro y decido ir a su casa que ya se encontraba vacía a buscar al bebe, pues no era normal que la señora se fuera sola y pensó que tal ves el niño se encontraba en la casa. Mi tío lo interrumpió y le dijo: estoy seguro que el niño no estaba en la casa, seguramente lo encontraron en la casita; sin saber el resto de la historia nos pidió que fuéramos a esa casita a terminar la historia, o que ¿tienen miedo? Nos dijo, y todos respondimos que un poco pero que si iríamos a la casita, nos subimos en su camioneta y nos fuimos hacia el campo.
Al llegar ahí, todo estaba muy oscuro pues obviamente ahí no hay alumbrado, entre un camino muy estrecho, entramos en las parcelas que estaban totalmente secas y descuidadas, a los lejos se podían escuchar los terribles sonidos de las lechuzas y si te fijabas con mas detenimiento alcanzabas a ver los brillantes ojos de algunas de estas aves. Mi tío se estaciono justo enfrente de la casita al bajarnos de la camioneta pudimos notar; que era una casita muy pequeña de hecho no era una casa, mas bien era una bodeguita; se notaba a leguas que tenia años que nadie se paraba por ahí, el foco de apenas 60w, no solo estaba fundido si no tronado, la bodeguita estaba totalmente polvosa y llena de telarañas por cualquier lado, la tierra estaba muy suelta y como hacia mucho aire todo tronaba de forma escalofriante. Después de estar algunos minutos tiesos observando aquello nos dispusimos a entrar uno atrás de otros, eso si todos muy bien agarrados de las manos.
Al entrar todo estaba muy oscuro y frio, la madera tronaba de una forma realmente aterradora, ahí dentro solo había un piso totalmente polvoso, y en una esquina del cuartito había una pala, un pico y algunos artefactos que se utilizaban para trabajar la tierra, decidimos sentarnos el piso todos en circulo y continuar con la historia; mis piernas temblaban y mi corazón palpitaba a mil por hora. Entonces mi primo continuo: efectivamente el bebe no estaba en la casa, la señora un poco espantada y temiendo por la vida del niño, decidió dar aviso para que buscaran al niño, lo buscaron en todos lados, hasta vinieron aquí a esta casita con la esperanza de que estuviera aquí, pero el niño no fue encontrado, el tiempo paso y las autoridades le restaron importancia y se olvidaron del caso.
Buuuu, entonces cual el chiste, le dijo mi tío a mi primo, el chiste es que: la gente cuenta que aquí, en esta casita todas las noches se escucha el llanto desesperado de un bebito, es por eso que los caballos se espantan cada vez que pasan por aquí, y la gente siempre rodea las parcelas para no tener que escuchar ese llanto que pareciera infernal. La verdad en ese momento todos nos espantamos mucho y decimos salir corriendo de ahí e irnos a la casa, nos subimos a la camioneta y cuando estábamos apunto de irnos, lo increíble sucedió, entre el sonido del viento y los crujidos de la madera, un el llanto de un niño se comenzó a escuchar, primero era muy bajito y lejano pero después comenzó a tomar fuerza, a tal grado que la mayoría de nosotros comenzamos a gritar y a llorar y entre la desesperación le pedíamos que dejara de llorar y nos dejara en paz. Salimos rápidamente, todos muy espantados y llorando.
Al día siguiente todos mencionábamos el suceso y no podíamos creer que la historia fuera real. Pero mi tío tenía la sensación de que el cadáver del niño estaba enterrado en alguna parte cerca de ahí, por lo que dio aviso a las autoridades y pidió escarbar a los al redores, efectivamente encontraron el cadáver del bebe justo de bajo del piso en donde estuvimos sentados aquella noche. Días después mis vacaciones terminaron y regrese a mi casa, un poco mas miedoso pero es gracias a eso que les pude contar esta historia.

No hay comentarios: